
No me gusta hacer las cosas de la casa. Se cocinar pero no me apasiona locamente. Se hacer una cama, se poner el lavarropas, se planchar y se barrer. Nada de esto es mi pasión, obviamente, y dudo que sea la pasión de cualquier mujer normal. Pero bueno, hay que resignarse y hacerlo.
Igual mañana viene la señora que viene una vez por semana y me deja todo prolijito y limpito...ahh, eso si que me gusta :D.
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